Suele pasar que un amigo o familiar, de vez
en cuando, se encuentra en una situación negativa o desagradable. Ante esto,
tratamos de auxiliar con cariño o buenas palabras. Sin embargo, nos encontramos
con alguien que quiere estar solo o no necesita de palabras “bonitas”.
Está comprobado que enviar rosas o regalar unos bellos arreglos florales promueve la secreción de
serotonina (la hormona de la felicidad).
Enviar flores no sólo levanta el ánimo de
quien las reciba, sino que además proporciona motivación. Por esta razón, cuando
encuentres un amigo que está pasando por malos momentos, obséquiale flores.
Hacerlo, lo pondrá mucho mejor. Además, hará
que sienta que debe de alivianarse porque tiene a personas que están pendientes
y tampoco se sienten bien.
No te equivoques. Ya sabes, ante estas situaciones es mucho mejor enviar un detalle que utilizar las palabras.
Aunque cueste aceptar, es verdad.
Una última recomendación: acompaña esos
arreglos con frases de motivación.
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